lunes, 3 de junio de 2013

Tu peor enemigo

Llevo más de un mes sin publicar en el Blog... y no por falta de cosas por decir... sino porque he tenido uno de los golpes profesionales más duros, inesperados y desconcertantes de mi carrera.
Hay veces en la vida en que algo sin importancia aparente nos afecta de una forma desmesurada, sobre todo porque nos pilla desprevenidas. Pero como siempre digo, de todo se aprende; aunque he necesitado un tiempo para digerir, aceptar e integrar los cambios y para poder escribir algo sincero sin dolor. 
Toda esta situación me ha llevado a reflexionar mucho sobre cómo vivimos nuestro camino profesional, cómo construimos (o destruimos) nuestra realidad como bailarinas y cómo nos afecta nuestro entorno personal y profesional en nuestra carrera.
Supongo que con el paso de los años vamos tomando confianza en nuestro "instinto" y en la experiencia... pero llega un día en que la vida nos pone en nuestro sitio para recordarnos que falta mucho por aprender (de nosotras mismas, de los demás y de la vida) y que aunque no nos guste, las cosas, las situaciones y las relaciones cambian... y más en época de crisis.

Siempre he sido consciente de la enorme suerte que tengo de tener a Eva Tallada como amiga, socia y compañera de aventuras y desventuras pero estos días me he acordado de todas aquellas mujeres danzantes que luchan ABSOLUTAMENTE SOLAS por tirar adelante sus proyectos, ya sea en una gran ciudad o en un pueblo remoto y francamente, las admiro a todas.

Normalmente, la gente tiene la idea bohemia de que una bailarina se pasa el día "bailando y fluyendo con la vida", pero la realidad es que hacer de la Danza nuestra profesión es un camino de constantes renuncias, sacrificios y de lucha infatigable. La Danza es un mundo similar a una "selva virgen" (sobretodo para bailarinas de estilos poco o nada conocidos) donde no hay más "ley" que la de la vida y donde vamos aprendiendo a base de ensayo-error porque no hay nada escrito, nadie dejó un camino abierto, no sabemos, y vamos avanzando a tientas (aunque con paso firme) tratando de abrirnos camino impulsadas por la necesidad de expresarnos y hacer realidad nuestros sueños. Seguramente, en ese camino a tientas cometemos errores, damos rodeos y encontramos peligros y callejones sin salida... pero también superamos barreras, aprendemos a marchas forzadas a creer en nosotras mismas y sobre todo aprendemos a no creer en los límites establecidos, sean del tipo que sean.

Es el precio que pagamos por hacer nuestro propio camino: la incertidumbre, la falta de apoyo (familiar, gubernamental o social), la soledad que sentimos y a veces, la desilusión que nos invade cuando nos esforzamos por algo o alguien que no lo merece. En cambio, ganamos en libertad de espíritu, en sinceridad con nosotras mismas y en aprendizaje. Ganamos en salud y conexión con nuestro cuerpo y algunas afortunadas, hasta nos "ganamos la vida" con ello.

Pero para bien y para mal, no estamos solas en todo esto, siempre hay alguien, una profesora, unas compañeras, unas alumnas, el público... gente que está ahí pero no siempre (o casi nunca) como nosotras esperamos. Ese es nuestro problema, esperar algo muy concreto de los demás: que cubran nuestras propias carencias emocionales.
A menudo nuestras familias no entienden nuestras decisiones, a veces ni siquiera nuestras parejas o amistades comprenden en profundidad nuestra pasión... es por eso que buscamos (necesitamos!) un reconocimiento de los demás, un gesto de aprobación de nuestra profesora, un cumplido de una compañera, el apoyo de las alumnas o el aplauso del público, cada una de nosotras necesitamos algo que nos ayude a dar sentido a todo esto y nos demuestre que "no estamos locas", que lo estamos haciendo bien y que vale la pena seguir intentándolo.

Pero... qué pasa cuando no hallas ese reconocimiento? O cuando incluso alguien trata de impedirte tu trabajo, o te copia? O cuando "hablan mal" de ti? Pues pasa que sale lo peor de una misma. Pasa que entonces te enfrentas cara a cara con el peor de tus enemigos: TU MISMA. En los momentos difíciles de tu carrera, cuando las cosas se ponen en tu contra (o al menos, eso crees) es cuando más necesitas confiar en ti misma y dejar que todo lo "malo" caiga por su propio peso y no retenerlo contigo.
A veces hay quien "soluciona" el enfrentamiento con su cara oscura buscando "otro enemigo" (los demás), pero eso no hace más que hacer crecer sus debilidades y alejarse de encontrar una solución real a sus "problemas".

Para mi, la peor (y la más común) de las emociones es EL MIEDO. El miedo a lo que sea, a fracasar, a tener que volver a empezar, a no gustar a los demás, a perder el trabajo,  a tener que luchar sola, a no saber... en definitiva, sentirse insegura, y créeme si te digo que la inseguridad genera las reacciones más disparatadas e irracionales que te puedas imaginar. El miedo es humano, pero el miedo mal canalizado paraliza, enajena, carcome y pudre el espíritu de una bailarina.

Pero déjame decirte algo, yo también tengo miedo. Tengo miedo cada inicio de curso porque no sé cuánta gente se apuntará a mis clases, también tengo un poquito de miedo cada día cuando voy a clase por si nos les gusta lo que tengo preparado a mis alumnas. Tengo miedo cada vez que organizo un festival o unos workshops, o cualquier actividad porque no sé cómo va a ir. También tengo miedo cada vez que emprendo una nueva coreografía, o cuando finalmente la muestro sobre un escenario. Tengo miedo cuando voy a Hacienda o a la Seguridad Social y tengo que rellenar mil impresos, cuando tengo que editar un video, o unas fotos, cuando tengo que hacer las cuentas de la escuela o programar mi propia web porque nunca nadie me enseñó a hacerlo. Tengo miedo de ver mi cuerpo envejecer, de estar enferma, de estar sola, tengo miedo de estancarme, de no poder aprender más por falta de tiempo, energía o dinero y sobretodo, tengo mucho miedo de perder la pasión por lo que hago y despertarme un día sin saber para qué o porqué bailo.
Pero también tengo fuerza. Fuerza y valor para superar mis miedos, aunque nadie crea en mi, aunque nadie me ayude ni me de una palmadita en el hombro, aunque nada pase por si solo y tenga que estirar de 1000 carros a la vez, aunque me equivoque o no sepa, siempre tengo fuerza para seguir adelante con una sonrisa, esa es MI MEJOR AMIGA, mi fuerza, mi valor y mis ganas de hacer posible un mundo (mi mundo) mejor.
Así es que tú, compañera, si sientes miedo, recuerda que no es más vilente quien no tiene miedo sino quien lo supera. Recuerda también que quizás esas personas que te hacen daño, tienen miedo igual o más que tú, pero tú debes ser más inteligente y ocuparte de TUS EMOCIONES.

Y eso cómo se hace? Muy fácil, BAILA. Cuando tengas rabia, cuando tengas miedo, cuando no tengas fuerzas... baila de corazón, déjalo salir, exprésate con sinceridad ante ti misma, no trates de ser bella, solo trata de llorar bailando, de gritar bailando, canalízate, olvídate, muévete hasta el éxtasis y no pares hasta entenderte, hasta verte a ti misma por dentro y asumir tu debilidad y tu fuerza... pero nunca, nunca trates de culpar a otro, ni de hacer daño porque solo lograrás hundirte más.

Con el paso de los años, entreveo que el camino de la Danza es un camino solitario, pero a la vez, es un camino infinitamente profundo en tu interior, si vas a emprender esta senda, tienes que estar dispuesta a lidiar con todo esto.
También te desvelaré otro secreto... yo soy una de esas personas que cuando me adulan y me dicen cosas bonitas... no me las creo, sin embargo, basta un solo comentario negativo para hacerme replantear  mi propia valía... creo que es bueno no ser "inmune" a las críticas negativas pues son lo que nos permite aprender y evolucionar... pero quizás haya que esforzarse por saber escuchar y valorar a aquellas personas que aprecian lo que hacemos o quienes somos, así es que te invito a aprender juntas, a valorarnos y querernos en nuestra justa medida.

Dedicado con cariño a todas mis compañeras bailarinas.
Noemí Castell.

17 comentarios:

  1. Noemí!
    Tus palabras son TAAAN APLICABLES práctcamente a cualquier disciplina artística/creativa..
    A saber cuánt@s nos sentimos sol@s en ese aspecto..igual es mejor no pensarlo demasiado. Más que nada porque se corre el riesgo, como en mi caso, de tirarlo todo por la ventana..o a la basura :)
    Un saludo
    TsG TrIb

    Igor.

    ResponderEliminar
  2. "Baila cuando estés desgarrada. Baila si te has quietado la venda. Baila en medio de la lucha. Baila en tu sangre. Baila cuando seas perfectamente libre". Rumi. Como dijo la gran Pina Bausch: "¡Dancemos, dancemos! De otra forma, estamos perdidos". Gracias, preciosa Noemí. ¡¡Mucha fuerza y amor para todas!!

    ResponderEliminar
  3. M'ha agradat molt el text Noe.
    Sempre he pensat que la por es el que fa a la gent fer les pitjors atrocitats.Fa que critiquis, fa que es comencin guerres etc... i tens molta raó.La por estarà allà però un ha de ser mes intel.ligent per assumir que es POR i gestionar-la el millor possible.Mai tirar-la als demès.Si tens por, has de treballar-la no queda un altre.I en el camí que em escollit ens en trobarem molta de por,estem constantment exposades a tot, i molt sovint tu ets el teu pitjor enemic fen-te creure que no vals,no pots,no ho aconseguiràs...
    M'ha agradat molt la frase " no trates de ser bella, solo trata de llorar bailando" .Si ens dediquèsim a fer coses mes des-de dins i no tant cap a fora (cosa difícil xq tu vols que les coses quedin boniques, veure't bonica, que et vegin bonica)potser no generaríem tantes frustracions personal.Tot seria mes pur,mes autèntic.No se.
    A la vida la única constat invariable ets tu mateixa, jo sempre intento preguntar-me...estàs sent la millor tu que pots? en la vida ?en al dansa? normalment la resposta es no jajaj però llavors penso que em toca seguir treballant.

    ResponderEliminar
  4. Hay una frase que me recuerdo muchas veces a mí misma, no sé si a modo de consolación..."Tener miedo no es malo, significa que tienes ALGO que perder". Sólo hay que luchar por no perder ese algo y trabajar el miedo, intentar utilizarlo a tu favor...

    ResponderEliminar
  5. Tu escrito es aplicable a cualquier ámbito de la vida... porque todo se basa en el miedo a la pérdida, el apego a todo nuestro entorno a todos los niveles que nos dirige casi toda nuestra vida...

    Las decepciones, las "pérdidas", los cambios... todo son lecciones de vida, depende de nosotros aprenderlas, sino la vida las hará volver de una forma diferente, porque al fin y al cabo la vida es un contínuo aprendizaje.

    En fin...después de leer esto me voy a permitir la licencia de decirte algo bonito porque me apetece mucho hacerlo; puedes aplicarte lo que dices en el artículo y creertelo o no.. tú decides: Ha sido un placer encontrarte en mi camino, he aprendido mucho a muchos niveles no sólo de baile y espero poder seguir haciéndolo.

    Sin más... gracias por tu artículo, cómo siempre me he emocionado.

    ResponderEliminar
  6. Hace poco hablaba del miedo con un amigo y nos propusimos vencer de vez en cuando pequeños miedos... Quizá así, a poquitos consigamos enfrentarnos con más ánimo a los grandes... Mi amigo me dijo que se iba a acercar a un chico de la discoteca a decirle que le gustaba... Yo le dije que lucharía contra mI miedo a los zombies, a lo que mi amigo me dijo: "creo que a los zombies ea mejor que les tengas miedo"... El trabajo empieza también por identificar aquellos miedos que nos bloquean, que nos hacen ser demasiado autocríticos y que nacen y alimentan nuestra inseguridad...
    Estoy super de acuerdo en que es bueno tener presente que todos tenemos miedos.
    Besazos!

    ResponderEliminar
  7. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  8. Hola Noemi!!
    Me siento muy identificada con todo lo que hablas en tu escrito… Siento que no soy la única que siente esa soledad y esos miedos que hacen, por lo menos en mi caso, que me sienta como subida en una montaña rusa, en los que un día estoy positiva y con fuerza y al día siguiente queriendo dejarlo todo quizás por un simple comentario.
    No se en mi caso los comentarios que mas valoro son los de las personas desconocidas, porque si han tenido el valor de acercarse para comentarte algo creo debe de ser sincero no se… nos damos mucho al publico que al final son los que disfrutan viéndonos.
    Tienes mucha suerte de tener a Eva Tallada luchando en tu mismo bando, es muy difícil conocer a alguien totalmente sincero dentro de este mundo, yo solo cuento con mi chico con el que puedo hablar de todo lo relacionado con el baile, además sincero y con muy buen criterio ;).
    Enhorabuena por este blog es un gustazo leerte!!!
    Maggie
    Tsg Trib.

    ResponderEliminar

  9. El miedo me ha acompañado durante toda la vida, y sigue haciéndolo. Durante este viaje, hemos mantenido feroces batallas, en ocasiones ha ganado él y en otras yo, pero aún saliendo victoriosa, me he dado cuenta que el mayor de los errores es negarlo, darle la espalda, pretender que no existe, ahí es cuando mi miedo se alimenta, acrecenta y se convierte en invencible.
    A veces vivimos el miedo como ajeno provocado por alguien o algo, cuando nuestro miedo somos nosotros mismo, negarlo no hace que deje de existir, buscar culpables o motivaciones en el exterior nos desconectan de lo esencial, tu miedo eres tú. Claro que puede haber un motivo o situación que nos lo despierte, pero es solo nuestro la manera como lo afrontamos y como lo vivimos, es también nuestra responsabilidad saber en los “jardines” que nos metemos y aceptar las consecuencias.
    En mi viaje junto al miedo aprendí que es más provechoso aceptarlo que negarlo, y sacar el lado positivo, el miedo convertido en prudencia, en ir con cuidado, que en mi caso me hace poner más consciencia en lo que hago. En este camino juntos intento mantener un “entente cordiale” con mi miedo, aunque a veces se desboca y sigue haciéndome caer, y yo tozuda levantándome haciéndome cada vez más fuerte.
    Creo que todo ser humano quiere y necesita ser querido y en esa búsqueda a veces nos ponemos en situaciones que se convierten en todo lo contrario de lo deseado, y nos causan dolor, sabiendo en el fondo que el “malo de la película” es uno mismo por querer ver cosas que no existían.
    En el mundo artístico los bailarines nos ponemos en estas situaciones continuamente, al dar una clase o al bailar, en mi caso sigo intentando deshacerme de los “que dirán”; “les gustaré”, cuando sé que a la primera a la que hay que gustar es una misma, lo demás vendrá después.
    Doy gracias cada día por tenerte en mi vida Noemí, sé que juntas y con nuestros miedos llegaremos donde queramos, disfrutando a cada momento,

    ResponderEliminar
  10. Querida Noemi,
    Qué bien escribes (ya te lo he dicho, pero quizá si lo digo amenudo...)
    Mi mundo laboral es muy distinto: yo soy psicoterapeuta. así que tb trabajo sola y encima, nadie me aplauda cuando termina una sesion:-) y sé que es de lo más difícil juzgarse uno mismo (en el buen sentido. o sea, utilizar mi propio juicio para saber si he hecho bien o no).
    Y en mi linea tampoco hay un manual (soy gestaltica, así que no hay dogmas), lo cual lo hace más dificil pero me gusta este reto y me obliga a ser creativa (aunque no de manera artística), porque cada cliente es un mundo en sí.
    Eso fue dicho no para disminuir tus palabras, sino para decir que creo que sé qué sientes.
    Y yo tb tengo que ser sincera y fiel a mí misma y mi intuición y decisiones profesionales, que no siempre gustan a los clientes, por lo menos en corto plazo. pero estoy segura de que tú tb has descubierto que cuando eres sincera de verdad, autentica, escuchas a tu voz interna es cuando me te aciertas.
    Eleanor Roosvelt (otra gran dama que nego ser la mujercita para complacerle a la gente)dijo: ¨nadie puede hacerte sentir inferior si no lo dejas¨. y yo añado: si no le tienes dentro de tí (=no piensas tu así, tb), y que eso se aplica a todos los adjetivos (gorda, fea, estupida) y, desgraciadamente, tb al reves: nadie puede hacerte sentir maraviollsa si tú no le dejas...
    espero que le dejas...
    y como alumna (que no viene por motivos completamente ajenas a tí y a tus clases) quiero decir que estar en tu presencia me hace sonrír, siempre.
    y creo que eres sexy y traviesa y admiro como te dejas serlo y eso me inspira.
    y última cosa: creo que la pasión - en todos los ámbitos: (justo estoy leyendo un enlace en un foro de terapeutas sobre si es posible mantener la pasión sexual con el mismo partner toda la vida)- es algo que si sigues alimentandolo, sigue creciendo. y solo si lo dejas pasar hambre, es cuando deja de sentir hambre.
    así que llena tu ¨nevera¨ y así no perderás la pasión. y gracias a ella, conquistarás todos los miedos.
    nos vemos en el taller, un abrazo fuerte

    ResponderEliminar
  11. Querida Noemí, he tenido el verdadero placer de conocerte y compartir contigo dos espacios especiales. Ahora además comparto tu reflexión. Gracias por tu libertad y por tu nobleza. Los bailarines somos una especie de guerreros, de la misma manera que tenemos que vencer nuestros temores y afrontar todas y cada una de las situaciones que se presentan, nos preparamos con todo lo que nos llegue y vamos a por ello con coraje, pero sobre todo con amor. No somos dueños de nuestro cuerpo, es prestado y tiene limitaciones como todo vehículo. Pero si que somos dueños de nuestra voluntad y libre albedrío que nos permite pasar los momentos más difíciles y los obstáculos más peligrosos e incómodos, con dignidad y gozo.
    Considérame tu compañera y amiga, además de ser tu alumna. Y que sepas que mi casa es tu casa, mi corazón ya está ligado al tuyo.
    Alma Toledo

    ResponderEliminar
  12. Muy bonito Noe,
    y muy acertado, este camino no es fácil y es bueno tener miedo para seguir creciendo como profesional y como persona.
    Abrazos
    Shabanna

    ResponderEliminar
  13. Mil millones de gracias a todos, por leer, reflexionar, compartir y escribir.
    Gracias por mantener esta llama viva y por decirme cosas tan bonitas.
    Un abrazo inmenso! :)

    ResponderEliminar
  14. Noemi.... me has emocionado con tus palabras, se me han humedecido los ojos....gracias

    ResponderEliminar
  15. Moltes gracies Noemi!!
    No ens coneixem pero he tingut la gran sort de trobar-me en aquest escrit.
    Sempre que algu em demana que balli em quedo paralitzada, sols soc capaç d'expresar-me i de despullar-me interiorment quan estic ballant en soletat. Fins ara pensava que això era perque no valia per la dansa (per molta pasió que hi tingui). Pero amb les teves paraules me'n he adonat que sols és por i que no soc la única que en sent. Així que et vull agraïr moltíssim les teves paraules perque gràcies a elles me'n he adonat que puc ser valenta i afrontar les meves pors per complir el meu somni que és la dansa.

    ResponderEliminar
  16. Me gusta mucho tu comentario. Creo que la danza es un vehículo fabuloso para el auto-bienestar personal, al margen de sus otras facetas, representacion-interpretación, autodisciplina, trabajo, etc. Es muy importante no perder jamás la capacidad personal de la que podríamos llamar "alegría porque sí ". No creo en esas chorradas de la tan destructiva sivcilogía moderna que pretende que la alegría "debe ser la consecuencia de algo". Yo no lo creo. Creo que siempre podemos invocarla a través de la danza. La danza fue el gran desarrollador del Espíritu y la mente, antes de que las religiones modernas usurparan su poder de la alegría y lo cambiaran por el repulsivo redenrorismo conceptual, que vive de la necesidad de pecado y culpa, en una asociacion tan falsaria como peligrosa. En realidad la culpa
    es tan solo un sintoma de ciertas formas de indefension sicológica ya sea natural o inducidas.

    ResponderEliminar
  17. Me gusta mucho tu comentario. Creo que la danza es un vehículo fabuloso para el auto-bienestar personal, al margen de sus otras facetas, representacion-interpretación, autodisciplina, trabajo, etc. Es muy importante no perder jamás la capacidad personal de la que podríamos llamar "alegría porque sí ". No creo en esas chorradas de la tan destructiva sicología moderna que pretende que la alegría "debe ser la consecuencia de algo". Yo no lo creo. Creo que siempre podemos invocarla a través de la danza. La danza fue el gran desarrollador del Espíritu y la mente, antes de que las religiones modernas usurparan su poder de la alegría y lo cambiaran por el repulsivo redentorismo conceptual, que vive de la necesidad de pecado y culpa, en una asociacion tan falsaria como peligrosa. En realidad la culpa
    es tan solo un sintoma de ciertas formas de indefension sicológica ya sea natural o inducidas.

    ResponderEliminar